Balenciaga, ha optado por una versión hiperrealista de maniquíes con el fin de impactar a todos los espectadores.
Para el lanzamiento de la flagship de Balenciaga, situada en la esquina de Madison Avenue con la calle 59, en Nueva York, Demna, director creativo de Balenciaga, ha transformado el espacio en una especie de realidad futurista de la moda.
Con un interior hecho totalmente de vidrio, con pantallas envolventes que proyectan cielos azules y otras escenas atmosféricas, y claro, los maniquíes impresos en 3D llevando las prendas de la colección otoño-invierno 2019 de la marca. La boutique parece salida de una época alterna a la nuestra, mas no lejana.
La tendencia es que en el futuro, no necesitemos asistir físicamente a la tienda de nuestra marca favorita para probarnos los mejores diseños. La ropa digital ya existe y también los maniquies hiperrealistas. Nada es imposible