Clubz se ha caracterizado por encontrar la nostalgia en su sonido. Destellos no es ninguna excepción, pero más que hacernos revivir otras épocas, representa una solidificación del sonido de la banda.
En un espacio sonoro atemporal, el dúo nos lleva por un viaje a través del tiempo, el ya conocido himno que es “Popscuro” fue solo un parteaguas para lo que vendría en este álbum. En su evolución nos encontramos con diferentes ritmos e instrumentos, desde basslines pegajosos como el de “Templos” que nos indican que estos chicos están listos para conquistar a una audiencia internacional. Así como “Caile” con Buscabulla, intencionalmente o no, es una canción hecha para bailar y ‘Nagano’, una fresca, poderosa y épica balada interpretada por la dulce voz de Ela Minus. Destellos no solamente es una exploración de nuevos instrumentos y diferentes ambientes, es un statement de lo mucho que han madurado Coco y Orlando, haciendo piezas que en la época de “Texturas” no hubiéramos imaginado.
El Lado A de Destellos nos recuerda al pegajoso pop con el que conocimos al dúo, y el Lado B siendo una parte más fresca, conceptual, donde no solamente exploran un sonido, sino, toda una nueva identidad y descubren un mapa de hacia dónde se dirigen en un futuro. “Súper Visión” es una pieza importante del disco mostrando un poco de nuevos caminos que podría tomar el dúo, acompañada por las vocales de Girl Ultra para darle el cierre ideal a este viaje.
Destellos es el primer álbum del grupo, sin embargo, la manera en que suena y que hablan sus letras, nos deja en claro que hay un largo camino que han recorrido personal y musicalmente.
