Hiperasia es el tercer disco de El Guincho. La vuelta de uno de los mejores productores del país tras su sonado éxito internacional a raíz de la publicación de Alegranza (2007) y Pop Negro (2010).
La idea de Hiperasia surge de la fascinación que siente El Guincho al descubrir el interior de los bazares Hiperasia, a las afueras de Madrid. “Los descubrí yendo a buscar una pizarra con Brian para nuestro estudio en Febrero de 2014. Me flipó. Deseché casi todo el material que tenía grabado y partí desde cero con la premisa: ¿Cómo sería ese espacio si fuera una música?”, dice Pablo.
Hiperasia es un disco de canciones que destaca por una producción que suena a futuro. Otra muestra de que El Guincho sabe modificar el contexto y hacer que las cosas vayan hacia la dirección que el marca, a base de talento, mucho trabajo y una visión privilegiada. “Pensé en hacer música que se empuja a sí misma. Me mola la música que va de los extremos hacia dentro. Como que intenta hacerse mono pero hay una fuerza, generalmente algo importante como una 808 o puede ser también una voz, que expulsa esos sonidos hacia los lados”.
Hiperasia ha sido grabado mayoritariamente en El Green, un estudio que Pablo y su ingeniero, Brian Hernández, montaron con sus propias manos -instalación eléctrica incluida- en un piso almacén encima de Everlasting Records. Aún así este disco contiene pistas grabadas en Gran Canaria desde 2012 y La Floresta (Barcelona) en 2013.
Pablo admite en Hiperasia la influencia de Madrid, ciudad a la que se mudó hace dos años. “Es Madrid cuando evoca lo macro. Las Tablas, China City, la M-30, Dalian Wanda Group, Edificio España. También adaptarme a una forma de vida exótica para mí. Experimentar más la ciudad, pasar más horas en la calle, menos privada que en Barcelona”.
