En el Día del Amor, el galardonado espectáculo “Kamelot el Castillo del Rey” llega nuevamente al Parque Naucalli este Domingo 17 de Febrero a partir del mediodía para invitar al público a celebrar el amor que tanta falta hace al mundo pero de una manera diferente, viviendo una experiencia inolvidable al lado de caballeros y princesas medievales y en donde la magia vive.
De este modo, Kamelot El Castillo del Rey que es un espectáculo medieval interactivo para toda la familia, recibirá a todo el público interesado en vivir una experiencia diferente a partir de las 12 del día en el Parque Naucalli este 17 de febrero, en donde los asistentes podrán casarse con hermosas princesas y valientes caballeros y ante el auspicio de Merlín que dará su bendición, lo mismo que la hechicera Mayela o la anacoreta Brow, que iluminará ésa relación especial que merece convertirse en un verdadero cuento de hadas para vivir felices para siempre, como en los cuentos de hadas.
Entre la amplia oferta que tendrán loe asistentes ese día dentro del espectáculo “Kamelot el Castillo del Rey” se encuentran combates, cetrería, mercadillo, tiro con arco, danza árabe, juegos y dinámicas de nuestros arlequines, gaitas y percusiones y baile de princesas, en el marco de un ambiente de película, donde las leyendas cobran vida y con la premisa de que “Kamelot el castillo del rey” hará posible que el amor lo pueda todo. Porque sin duda, una de las aventuras más extraordinarias que puede vivir el ser humano es el amor, tema que ha inspirado a artistas en todas las manifestaciones de arte, como en este caso con el amor cortesano medieval, con caballeros que en silencio amaban a sus damas en un amor profundo y platónico frente a los matrimonios arreglados. Este amor callado y apasionado le daba la fuerza para realizar lo imposible con hazañas heroicas que se plasmaban en cantos y leyendas.
Esta apuesta va encaminada hacia esa forma de concebir las relaciones medievales, en el marco de una aventura de película donde las leyendas cobran vida, con la presencia de caballeros y princesas, magos, juglares, arlequines y bailarinas, creando un mundo mágico fuera de serie, para vivir el amor y que el público asistente pueda casarse como en ésos tiempos. “Podéis tener mucha fe pero sin amor no tenéis nada” aseveraba el aposto San Pablo; la vida sin amor se convierte en un viaje, hueco y vacío. El amor es un salto de fe, por eso “Kamelot el Castillo del Rey” invita al público a atreverse y ser parte de la llama del amor que enciende el corazón, para que espada en mano y rodilla al piso se ruegue a la amada princesa de luz a casarse y brote de sus labios una palabra de amor.
