Las cifras no mienten: tras el estreno de “Bohemian Rhapsody” , los temas de Queen tomaron por asalto Spotify y otras plataformas, incluso superando en reproducciones a figuras actuales como Maluma, Shakira y Nicky Jam. Los melómanos ochenteros lo tomaron como un acto de justicia poética.
“Freddie Mercury: una biografía” libro del ilustrador español Alfonso Casas que fue publicado en octubre del año pasado y que recorre de forma visual la vida y carrera del artista. Se trata de un atractivo volumen que toma como punto de partida la afición de Casas por la canción más famosa de Queen, “Bohemian Rhapsody”, pero que también se ocupa de los orígenes de Mercury, desde que nació en 1946 como Farrokh Bulsara, en la isla de Zanzíbar. Una infancia que devendría en una etapa de transformaciones, como el paso de su conservadora fe parsi a su inclinación por el rock and roll, el viaje de la India –donde creció– al Reino Unido, y los múltiples cambios de look, que son la gran materia prima para el desborde colorido que incluye este libro.
En ese aspecto es que encontramos otro de los valores de esta biografía ilustrada: el estilo es siempre respetuoso y mesurado, y evita la caricaturización grotesca en la que es tan fácil caer tratándose de personajes tan reconocibles como Mercury. Hay que tener en cuenta que los trazos de Casas vienen acompañados de una narración sobre la vida del cantante, por lo que van más allá de un simple álbum de figuras. Como señala en el prólogo, la intención del libro fue desde el inicio “dibujar, de manera literal y metafórica, un retrato del enorme Freddie Mercury”.
Casas es reconocido por los cómics: “Amores minúsculos” (2012) y “El final de todos los agostos” (2017), así como el libro ilustrado “Se(nti)mental” (2015), en los que las ilustraciones suelen estar impregnadas de una carga emocional poderosa. Ocurre lo mismo con esta obra sobre Mercury y seguramente se puede intuir algo similar para su próximo proyecto, ya anunciado: otra biografía visual sobre el poeta español Federico García Lorca. Las expectativas son altas.