Chiapas es uno de los lugares con mayor riqueza cultural y diversidad étnica de la República Mexicana y, sobre todo, con mayor talento. Geraldine Cabrera, una emprendedora mexicana, al haber vivido de manera cercana el contexto indígena de dicha entidad gracias a su abuela, sentía que al mudarse a la Ciudad de México debía poner en alto sus raíces y mostrar la femineidad que caracteriza a las mujeres artesanas, a través de la incorporación de elementos estéticos, textiles y simbología maya, mediante una propuesta urbana contemporánea en sus prendas. Es así como nace Mayuk.
Mayuk pretende ser el enlace donde la mujer indígena brinda su creatividad y crea piezas exclusivas para que la mujer urbana tenga una propuesta de moda única que puede aplicar en cualquier escenario de su vida. Por ello, Geraldine involucra a mujeres indígenas en todo el proceso del desarrollo de su marca y hacer honor a la ideología de Mayuk que significa “no hay”: “No hay restricciones en la creatividad, no hay límites para el uso de materiales, no hay engaño al consumidor, ni tampoco hay abuso al trabajo de ellas”.
Uno de sus objetivos es dar trabajo a este sector que atraviesa muchos retos que van desde el lenguaje, hasta el machismo, por lo que buscan llegar a más personas poniendo en alto su lema de ser una marca consciente. Para esto, además de utilizar las redes sociales como todo emprendedor de la actualidad, también generan visibilidad en eventos como los bazares de moda.
Un día antes de presentarse en su primer bazar ubicado en una de las zonas más exclusivas de la Ciudad de México, Mayuk se acercó con Clip para adquirir su dispositivo Clip Plus 2, con el objetivo de ofrecer a sus clientes una alternativa de pago segura. “Clip es un método de pago que me permitió atender todas las necesidades hasta de mis clientas más exigentes, pues aceptan todas las tarjetas de crédito y débito, emitidas por Visa, Mastercard y American Express, lo que me permitió vender el 100% de mi inventario. Estar en el lugar correcto (el bazar), con las personas correctas (el equipo conformado por las artesanas) y herramientas correctas (Clip) marcó un antes y después para la marca”, asegura Geraldine Cabrera.
Al ser los materiales la base principal en la creación de una prenda, las mujeres artesanas proponen utilizar hilos estéticos que ellas mismas adquieren, de muy buena calidad y durabilidad, así como crear sus propios materiales orgánicos para un consumidor más consciente. Es aquí donde el rol de la tecnología cobró más fuerza para Mayuk, pues al estar a kilómetros de distancia, debían mejorar la toma de decisiones. En ese sentido, la empresaria comparte: “Son mujeres que han aprendido a usar la tecnología para comunicarse y avanzar con los proyectos que determinamos. A través de diferentes plataformas de comunicación, me comparten fotografías de los materiales que proponen utilizar, sus avances en la producción de prendas y cualquier duda o imprevisto que llegue a surgir”.
Para la marca mexicana, el crecimiento ha sido un proceso de aprendizaje en equipo y uno de sus planes es tener presencia física para resolver solicitudes por parte de sus clientes. Mientras tanto, han implementado su catálogo en línea. Para conocer más acerca de su línea de productos, visita: Mayuk Textiles.
