Este nuevo cuarto material de la cantante británica Lily Allen, aparte de expresar su talento musical fue el vinculo para mostrarnos su lado más personal, donde aborda temas sobre su maternidad, la separación que vivió y los desbordes del pasado.
El sucesor de Sheezus en el 2014 da inicio con la frase: “Sí, soy una mala madre, soy una mala esposa. Lo has leído en las redes sociales, lo has leído online”. Para la producción de este disco el encargado fue Mark Ronson, y los artistas que participaron fueron: Giggs, Burna Boy y Lady Chann.
Con respecto al lanzamiento de este álbum, la cantante comentó: “El mundo está a merced del miedo y la vergüenza. Y no siento que podamos comenzar a superar estas cosas hasta que hablemos de ellas abiertamente y dejemos de tener miedo de lo que suceda como resultado”.